lunes, 30 de octubre de 2017

Inktober 2017 1/3

Según tenía entendido el Inktober era una especie de ayuda entre dibujantes e ilustradores que se daban entre elles, tanto para darse a conocer, como para tener ideas sobre qué dibujar durante el mes de Octubre. Sin embargo, en los últimos tiempos, el Inktober ha tenido una variante diferente, en la que escritores y juntaletras han cogido las bases para crear microrrelatos cada día del mes de Octubre. Voy a obviar que parece un ataque a invisibilizar la lucha de les ilustradores que tan mal es tratada fuera de su gremio porque el ser humano es gilipollas.
En Twitter, al menos esta vez, han querido ir más allá, y han juntado imágenes de por ahí que ya podrían no sé... haberse juntado con ilustradores y haber creado cosas juntes. Pero quién soy yo, que sí, que algunes lo han hecho, pero una minoría muy triste y desoladora.
Según tengo entendido, la cosa tenía su jugo si encima ambos se complementaban, imagen y escrito, pero han salido cosas un tanto desastrosas aunque también geniales. Otra característica del Inktober, creo que de tanto para ilustradores como para escritores, es que alguien se compromete a hacer un listado de palabras o de temática para cada día, y se van haciendo. En el caso de les escritores, la cosa es usar la palabra al menos una vez en el texto.

Antes de todo, aclarar que no voy a entrar en el juego que tanto he visto por ahí de: hay dos tipos de escritores, en el Inktober (o fuera de él) porque no me gusta la dualidad. Desintoxicaros de una vez de ella, la dualidad es el mal y el binarismo. Nunca hay dos tipos únicamente de nada. Siempre hay una gran variedad, le moleste a quien le moleste, es lo que hay y si no te cabe en el cajón que es tu sesera, lo mismo es porque los seres vivos no se han de encerrar en cajones, digo, no hace falta encerrarlos hasta que se queden sin aire y solo haya dos tipos y digas: hala, ¿ves cómo solo había dos tipos?

Quiero empezar agradeciendo a todos aquellos seres que se tomaron la molestia de hacer un hilo con sus Inktober y ponerlos todos juntos. Se nota así que queríais ser leídes sí o sí y que nadie se perdiera ninguno de los vuestros.
También quiero agradecer a aquellos seres que saben qué es un (micro)rrelato, es sorprendente, pero en los tiempos que corren, con tanta información pululando a nuestro lado, existen muchos seres que aún no lo saben. Qué se puede esperar de seres que se piensan que "El señor de los Anillos", los libros, es fantasía épica.
Mis ojos quieren agradecer a aquellos seres que no han puesto una letra minúscula, una fuente ilegible, o un color chillón.

El resto... ¿acaso sois seres sin alma?

Y que lo haya tenido que poner en
tamaño grande para que se vea algo...
Para abrir boca tenemos a une juntaletras y siento pena incluso por el resto de juntaletras, que yo diga esto después de todos los bodrios de juntaletras que me he tenido que leer a lo largo de mi vida tiene delito... se trata de Lulú von Flama, autore de intrigantes microrrelatos que no cuentan nada que además te quedarás sin vista, puesto que no sabe armonizar ilustración, fuente y color de fuente. Que ya me dirás tú, qué misterio tiene que si el fondo es tirando a oscurillo o con cambios de color, dime tú, por qué no puedes cambiarle el matiz del fondo, o cambiar si acaso el color de la fuente para no cegar a nadie. Qué necesidad de cegar a tu lector.
Esta criatura ha ido con la idea de crear una historia completa, es decir, no solo crear microrrelatos con cada día sino que cada día siguiera al anterior, sin embargo, no. ¿Y por qué no? Pues porque no sabe introducir al lector, además el primero va de la protagonista Ebonliss que va a beber a la fuente de la juventud eterna, mientras el narrador usa muchos juegos retóricos inútiles que no vienen a cuento y ya está. No hay conflicto. Es un ir.

Miro la pared y creo que me cuenta
cosas más interesantes que tú.
O simplemente cosas.
Pero es que al segundo día, digo que se supone que es una continuación, pero no lo parece porque de la nada, Ebonliss está luchando con una bestia junto a un gamusino de oscuridad y tiene dudas de si abrir un cofre, entonces su gamusino llama a unos gamusinos luminosos. Y se nos desvela que la prota es una necromante.

Y paro ya, que sí que todo apunta a que es como una especie de spin off de algo que haya escrito por ahí pero, en cuyo caso lo sea, ¿ni un mínimo de respeto por el resto? ¿ni siquiera por lo que es un (micro)rrelato? ¿Ni por la vista de les demás? Una vez más me demuestra lo putrefacto que está el mercado literario para que ni tus amigues te digan, mira que me destrozas la vista y por eso tanto fav, tanto RT y ningún comentario.

Os voy a contar, por si hay algún despistado lo que es escribir una historia. Una historia ha de tener un por qué, un cómo, un dónde, un cuándo, el cuánto no siempre es tan importante y el quién o quiénes a veces se puede sustituir por un qué. La cuestión es que una historia ha de tener un origen y no tiene por qué ese origen estar al inicio de la historia y necesariamente ha de tener un desarrollo y para que haya un desarrollo, tiene uno que experimentar obstáculos, y tiene que haber un final. Incluso para cerrar capítulos ha de haber mini finales. Entonces si una historia es eso, un relato es contarlo de forma breve y un microrrelato de contarlo de forma aún más breve. Y se puede, ya os digo yo que se puede y se puede transmitir mucho. Y contar una historia y hasta conmover. Pero esto de aquí no es hacer un microrrelato, es juntar muy de mala manera letras e imágenes.



Un degradado en la imagen de fondo
hubiera venido de perlas,
o un marco translúcido para el texto.
Pasemos a algo más alegre y no tan doloroso para la vista, por lo menos sus micros tienen mucho más sentido que los de la anterior mencionada, y extraña vez nos ciega, hablamos de Artur Guirado. No están entrelazados, no se complica tanto la vida y sin embargo por lo menos llega a lo básico, cuenta una historia, llega al lector, alguna que otra vez hace retelling y no lo hace de una manera pesada, como he visto en otras cuentas, lo hace de forma ligera, armoniosa. Cuando acabas de leerle no te crees que hayas terminado. Sus imágenes rara vez interfieren con la lectura del texto, que a mí realmente es un poco como que me da igual, mientras pueda leer lo que hay escrito, que haya la imagen que os dé la real gana. Además es de los que ha intentado poner en un hilo todos los micros.

Si pincháis en su nombre, os llevará a un
micro que también me gusta mucho.
Del siguiente, he tenido mis sentimientos encontrados, porque escribe bien pero muchas veces escogía unas fuentes y unas imágenes que a determinadas horas del día se hacía incluso más difícil de ver qué narices contaba. Se trata de Fabionstein y hasta reconozco que con uno de sus micros me han entrado ganas de escribir sobre una idea a la que siempre le he dado muchas vueltas pero nunca me he llegado a ir por ciertos derroteros. La forma de escribir de este usuario es ágil, sin muchos juegos de palabras, cosa que en un microrrelato se agradece el hecho de que no se exceda el uso de ellos. Sabe ser poético en los relatos que piden serlo y sabe ser voraz en los relatos voraces. Y todos cuentan
algo.

¿No había un trazo de fuente más fino?





Llegamos a uno de los usuarios por excelencia de los jodevistas. Pero aunque sea una jodevistas, sabe poner cuadros con transparencias si ve que la imagen podría parecerse al color del texto. A veces lo hace. Otras veces parece importarle una mierda.
Y así es como tenemos cosas que se pueden leer (y además buenas) y cosas que no se pueden leer (y además... no lo sé porque no se pueden leer). Todo esto de la mano de: Adriana Tejada.
Oda a lo feo e ilegible. Nadie hubiera imaginado,
que se viera algo tan mal en un concurso de relatos.

La siguiente es AlbaMCheshire me resulta espléndida su pluma, o su tecleo, o su todo. Me transmite serenidad en los momentos serenos y me agita el corazón en los momentos más misteriosos de la trama. La mayoría de sus textos los ha llevado hacia los retelling y qué señores retelling desde Arturo de Camelot (o eso es lo que da a entender) hasta Caperucita, también se coge su momento para Don Quijote. Y ninguna imagen interfiere en la lectura, ni el color de la fuente ni la fuente todo es armonía y es maravilloso. Como los tiene todos seguidos en el hilo y ya hay muchas capturas de imágenes y también me puede un poco la pereza ahora mismo, solo voy a decir que me encantan los micros del día 6, del día 10 y del día 27; aunque el día 11 me ha dejado un poco en shock.

¿Habéis descansado la vista? Pues volvemos a rompernos los ojos. Ahora de la mano de Madefet, es un usuario que al principio del Inktober ponía sus escritos en un fondo negro con letras blancas, tenía su pase. Pero un día debió de levantarse diferente, como con ganas de innovar y creo que debió de estarse quietecite. Porque lo que hizo fue coger una foto en tonos sepia oscuros y añadir el texto en negro con una letra diminuta. Y no se quedó ahí.

Al día siguiente pilló una foto de unas dunas y volvió a hacer lo mismo pero agrandando la letra. Después viendo que fantásticas que eran las fotos marruncias dijo, oye, las letras negras... no me terminan de convencer voy a volver a usar el blanco y puso texto blanco sobre foto marruncia. Vio que parecía legible y no podía ser. Así que un día debió decirse, tengo que hacer de nuevo la letra más pequeña, en blanco, que me gusta el blanco, ¿y de fondo esta vez? ¡Ah, de fondo una foto en blanco y negro! Así si caen cosas de blanco en mis letras blancas será difícil de leer, qué guay. Pero elle siguió innovando y volvió con las letras negras y puso su fondo en blanco, quedaba bien de leer, no lo pudo soportar y puso una fuente extraña y en cursiva. Y vosotros diréis "por qué". Yo os lo diré. Lo tenía que hacer, para poder llegar a la siguiente innovación: fondo blanco, letras negras, fuente en cursiva, caligrafía horrenda de carta de pijos.
Pensaréis que igual ya no podía llegar a más. Estáis equivocades. Llegó a más. Volvió con su aliada, la letra de color blanco, ¿por qué? Porque la foto tenía una cara pálida, debía de poner ese color de fuente para que fuese difícil de leer, o tal vez para que fuesen a juego porque igual es esa la cosa, que no es la imagen vaya con el texto, es que la imagen vaya con el color del texto (Es que no explicáis bien las bases).

Sin embargo, se veía demasiado bien, le pareció horrible. Así que volvió a: fondo blanco, letras negras, fuente en cursiva, caligrafía horrenda de carta de pijos, aunque creo que es incluso más fea que la otra. Pero la innovación que se lleva la palma sin dudarlo es la del día 27. Es que no tengo palabras para describir semejante bodrio. Creo que como miope con muchísimas dioptrías, veo muchísimo mejor la entrada sin gafas a un paso de distancia, que ese relato con gafas con todo el zoom del mundo.

Una forma curiosa de ver las elecciones de la vida
y tu propia mente. 
De la innovadora que te cagas, vamos al cero innovador pero cegador. Que no es no innove Víctor, simplemente no cambia tanto ni nada de fondo. Es fiel a un fondo rojizo, su texto siempre es blanco diminuto y centrado en cuanto a la imagen. La dificultad que existe para leerlo, no radica con que no se vea por culpa del fondo, es simplemente que la letra es demasiado enana. Me gusta "Largo" y también cómo está llevado "Tímido". Son textos sencillos pero textos al fin y al cabo.

Ahora llegamos a visión maravillosa pero los textos no me dicen nada, me siento como si leyera oraciones para analizar del puro estilo de: María va a casa de Juan después de clase.
Las oraciones están bien construidas, todo está bien sin embargo, no me termina de decir nada, Nómada, no sé cómo lo haces pero casi estás tan cerca de no decirme nada como lo está Lulú von Flama y por lo menos tienes la decencia de no cegarme. El único relato que me llega a contar algo y no es mucho, es "Destrozado" y me intriga el cambio de letra redonda a letra cursiva que existe en ese texto, no entiendo por qué está en cursiva "autoestima".

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