domingo, 21 de agosto de 2016

"El Jardín del Dragón Púrpura" de Carole Wilkinson

"—Come gusanos— dijo el dragón.
—¿Gusanos?
—Buenos para la vista.
—¿Algo más?
—No muchos. Muchos gusanos
hacen que Kai tire pedos"
Autoría: Carole Wilkinson
Título: Garden of the Purple Dragon (Dragonkeeper)
Sinopsis: Ping cree que el cachorro de dragón está a salvo en el santuario de la montaña Tai Shan. Sin embargo, mientras su destino siga unido al tan ambicioso dragón, Ping nunca estará a salvo. Amigos y enemigos descubren el santuario casi al mismo tiempo y Ping no sabe en quién confiar. La muchacha deberá enfrentarse al nigromante, quien no renuncia a su despiadada persecución para apoderarse del dragón, y tendrá que encontrarse cara a cara también con el joven emperador, quien la nombró guardiana imperial de los dragones y a quien traicionó al ayudar a escapar a Danzi. Mientras el viejo dragón la visita en sueños para ofrecerle sabiduría y consejos, Ping debe encontrar el valor y la fuerza necesarios para enfrentarse a sus enemigos y cumplir con su deber proteger a Lung Kai Duan, el travieso cachorro de dragón.



Por si no lo sabíais, lectores invisibles, soy ese tipo de lector y de ser vivo, que coge un libro sin preguntarse mucho si es la segunda o la tercera parte. Es algo que me he pasado muchas veces, pero por suerte hay libros que saben dar esas pinceladas de restos del pasado sin pasarse, y este es el caso de este libro. Tampoco soy muy de leer sinopsis, pero al buscarla para el blog -porque el libro que tengo... me lo han prestado sin lo que envuelve a ciertos libros de pasta dura-, me deja entrever casi lo mismo que cuando Ping recuerda cosas de su pasado, a excepción de pequeñas cosas.

lunes, 8 de agosto de 2016

Me gusta ser anormal

Como podéis ver en el título, sí, me gusta, debería ser deporte nacional. Ahora paso a explicaros no os preocupéis. Igual también queréis serlo conmigo.

Como iba diciendo, me gusta ser anormal. ¿Por qué? Quizás te preguntarás Pues verás, te diré. Ya paro. El caso es que después de ver esos "nuevos" géneros emergidos del merchandising más estúpido que pueda crear el mundo editorial o quién narices haya sido esta vez, prefiero ser anormal a ser como esa marabunta de seres que están ultra felices por ver un nuevo género, cuando es lo mismo pero con otro nombre.

Primero, o al menos el primero que leí, fue el chick lit, y este género se traduce simplemente como aquella novela ligera (o corta) de temática romántica simple, es decir, con personajes más planos que una hoja de papel y cuya trama es tan difícil de entender como que si tocas el fuego te vas a quemar. Y tuvo bastante revuelo porque era nuevo y oh, oh, oh, qué subidón, oh.